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Cursos de fitoterapia

El empleo de las plantas medicinales con fines curativos nunca ha dejado de tener eficacia. Por  ejemplo el romero es una de ellas. En los cursos de fitoterapia descubriremos sus propiedades medicinales y aromáticas.

El romero pertenece a la familia de las labiadas. Su nombre en catalán es Romaní, y en vasco, Erromeru. Es  un subarbusto común y muy extendido en toda la zona mediterránea. En las zonas de matorrales y encinas. Llega a alcanzar hasta un metro de altura. Sus hojas son lanceoladas, espesas, coriáceas de color verde oscuro. Sus flores son pequeñas de color azul o violeta claro. Toda la planta desprende un olor alcanforado que la caracteriza. Su época de floración es casi todo el año.

En los cursos de fitoterapia descubriremos que el romero es una planta muy antigua y generosamente elogiada por sus innumerables propiedades terapéuticas y aromáticas.

Su aceite esencial contiene muchos terpenos (borneol, cineol y pineno), alcanfor, ácidos orgánicos, heterósidos, sapónidos y colina.

El romero en fitoterapia se puede aplicar para estimular, es antiespasmódico, actúa sobre la secreción biliar, es diurético (ayuda con la retención de líquidos), es estomacal y antiinflamatorio, va genial para las digestiones pesadas; previene las intoxicaciones alimentarias.Favorece la recuperación en las enfermedades de tipo respiratorio.

En uso tópico, se puede usar en ungüentos o en el famoso alcohol de romero que se utiliza como antiinflamatorio y analgésico.

El romero, por lo tanto, es una planta que no debe faltar en nuestro hogar.