Hace mucho tiempo que conocemos los valores nutritivos que la avena tiene para la piel. Este producto absorbe y elimina la suciedad y las impurezas de la superficie, limpia profundamente los poros e hidrata y suaviza nuestra epidermis. Hoy te proponemos algunas mascarillas de harina de avena que de manera natural y eficaz te servirán como tratamiento cutáneo.
Mascarilla de harina de avena
Esta es una mascarilla básica que sirve como un excelente exfoliante. Mezcla una taza de avena seca con 1/3 taza de agua tibia hasta formar una pasta pegajosa y suave. Extiéndela con la yema de los dedos sobre hombros y rostro, protegiendo el área de los ojos. Luego recuéstate y relájate hasta que la mascarilla se seque. Cuando sienta un poco de escozor, es hora de lavar con agua tibia y secar la piel con una toalla limpia. Aplica al final una crema hidratante para sellar.
Mascarilla de avena con miel y limón
Con esta mascarilla la piel te quedará como la seda. Calienta 3 cucharadas de miel (no demasiado caliente) y combina con 2 cucharadas de harina de avena y 1 de jugo de limón hasta formar una pasta homogénea, lo suficientemente espesa como para que se fije en la piel. Con los dedos cubre cara, hombros y cuello con ella, cuidando de dejar los ojos libres.
Relájate y deja que actúe por media hora. Luego lava con abundante agua tibia y termina sellando con una crema hidratante.
Máscara de avena con aloe vera y clara de huevo
Esta es una mascarilla ideal para las pieles grasas, ya que las deja suaves e hidratadas. Basta pelar un pepino y cortarlo en trozos. Entonces se coloca en la batidora hasta formar un puré suave. Pásalo a una taza y añade 2 cucharadas de harina de avena y una cucharada de gel de aloe vera. Mezcla todo bien. Bate en otro recipiente una clara de huevo y agrega a la pasta anterior. Remueve hasta que adquiera una consistencia suave y uniforme.
Extiende la pasta por la cara y el cuello y deja durante 15 o 20 minutos. Finalmente lava con agua fría abundante, seca y aplica una crema hidratante.
Mascarilla de avena con huevo y aceite de oliva
Otra mascarilla básica de harina de avena, donde el huevo nutre y reafirma la piel, mientras el aceite de oliva la hidrata. Mezcla un huevo, media taza de avena y 2 cucharaditas de aceite de oliva extra virgen para obtener una pasta gruesa. Espárcela con suavidad por la cara y el cuello. Mantenla por 15-20 minutos.
Lava con agua fría y caliente alternativamente. Seca con una toalla limpia y aplica una crema hidratante.
Todos estos remedios serán muy útiles para mantener una piel saludable y hermosa. Solo escoge aquel que te sea más fácil de realizar y comienza regularmente a aplicar en tu cuerpo tomando unos minutos de relajación y reposo. Los efectos se notarán más pronto de lo que imaginas.