No somos conscientes de lo importante que es limpiar nuestro organismo al menos una vez al año. Depurar el organismo significa estimular los mecanismos que se necesitan para eliminar esa materia tóxica del cuerpo y así evitar en la medida de lo posible las enfermedades.
A lo largo de nuestra vida nuestro cuerpo se va intoxicando por diferentes razones,químicos, azúcares, harinas refinadas, alimentos de origen animal que están cargados de toxinas, por llevar una vida sedentaria, por la elevada contaminación ambiental, cansancio, estrés, fármacos, residuos alimenticios, ingestión de alimentos tóxicos, como por ejemplo, el alcohol, el café, etc. Todo esto hace que nuestros órganos vayan sufriendo un desgaste mayor del necesario y como consecuencia se acorte nuestra vida. Al igual que limpiamos nuestra casa o llevamos el coche al taller para una revisión o cambio de aceite, nuestro cuerpo también necesita limpiarse y así preservar nuestra salud.
Una alimentación crudivegana, no sólo es depurativa sino que permite a nuestro cuerpo regenerarse y regularse más rápidamente, gracias a ser una alimentación libre de toxinas. Conseguiremos recuperar nuestra salud y equilibrio y evitaremos posibles enfermedades.
¿Cómo limpiar nuestro organismo?
Como estudiamos en nuestro curso de Dietética, lo primero que debemos eliminar de nuestra dieta son los productos de origen animal. Están cargados de toxinas, hormonas, aditivos, excesivas proteínas, antibióticos, grasa y colesterol. Si cambiamos el pescado, la carne, leche, huevo, pollo y demás productos por alimentos de origen vegetal bajos en grasa nos encontraremos mucho mejor. Por supuesto deberemos evitar todo tipo de sustancias estimulantes, químicos y alimentos tratados, como tabaco, alcohol, bebidas gaseosas, comida envasada cargada con aditivos, conservantes, sabores artificiales, colorantes, hormonas…
Sal y azúcar refinadas, harinas refinadas, incluye pasta, pan, galletas que no sean con cereales 100% integrales, gluten, aceites refinados…
Basa tu alimentación en fruta y verdura cruda. Muy importante, baja en grasa. Como platos cocinados, las legumbres y cereales integrales son la opción más saludable. Por ejemplo, el mijo, quínoa, trigo sarraceno y amaranto. Los vegetales crudos y ecológicos mantienen intactas sus propiedades, minerales, vitaminas, enzimas, fibra, antioxidantes y fitonutrientes. Nos dan toda la energía que necesitamos y mantienen nuestro cuerpo limpio y saludable, tanto a nivel celular como en nuestra sangre. Por lo tanto estaremos evitando enfermedades. Al desintoxicar tu cuerpo y estar saludable, también ganas claridad mental y bienestar emocional. Activas tu consciencia, conectas con tu interior y con el mundo.
Es importantísimo que hagas ejercicio. Una dieta saludable acompañada de ejercicio es la combinación perfecta para eliminar toxinas, perder peso, fortalecer músculos, órganos, sistema circulatorio y respiratorio y digestivo. Previene el estrés y nos hace estar más relajados y felices.
Debes beber mucha agua, de 2 a 3 litros diarios. Cuando tienes una alimentación 100% crudivegana, bebes menos agua porque ya estás ingiriendo la naturalmente presente en la fruta y verdura.
Descansa y duerme suficientes horas. Así permites a tu cuerpo el proceso de restauración y que recupere energía, fuerza y elimine mejor las toxinas.
Otro punto a tener en cuenta es practicar actividades que te hagan liberar tensiones y relajarte, conectar contigo y con los demás, como escuchar música, quedar con tus amigos, abrazar, besar, respirar aire puro, bailar, cantar, gritar, sonreír, conocer gente diferente, probar cosas nuevas… Sin duda, el mejor sistema inmunológico es nuestra mente!
Cuando sometes a tu cuerpo a un proceso de limpieza, a veces puede que surjan efectos secundarios, como malestar general, vómitos, diarreas, granos en la cara… Es la manera que tiene tu cuerpo de expulsar las toxinas.
Puede parecer un cambio radical de nuestros hábitos y quizás para muchos difícil pero en poco tiempo notaréis grandes resultados y por supuesto a largo plazo os sentiréis totalmente en armonía con vuestro cuerpo.
Génesis Gutiérrez
