¿Te preguntas qué son las flores de bach? Te contamos su origen y todo lo que necesitas saber… El Dr Bach fue un médico y homeópata que se dedicó a investigar el origen de las enfermedades. Sus conclusiones le hicieron ver que, muchos de los males que afectan al cuerpo, tienen su origen en la mente y en las emociones más ocultas. Algunas, tan ocultas que ni siquiera somos conscientes de ellas.
Nuestros miedos, odios, la soledad que podemos sentir o la depresión, pueden somatizarse en nuestro cuerpo dando lugar a enfermedades que, por mucho que se traten con medicamentos, vuelven una y otra vez ya que no se ha atajado de raíz la causa que las provoca.
Finalmente, el doctor concluyó en que hay 38 posibles tratamientos, a los que llamó flores de Bach, que pueden utilizarse para tratar estas emociones y equilibrarlas. El nombre de flores de Bach hace referencia a su creador y también al hecho de que proceden de la decocción de diversas flores y plantas a las cuales se les añade una pequeña parte de alcohol, consiguiendo así las famosas esencias.
Aunque contienen plantas como flores y otros vegetales, las flores de Bach no están consideradas parte de la fitoterapia sino que son una terapia alternativa diferente.
Las 38 flores de Bach
El terapeuta es el especialista que sabe cómo mezclar las 38 flores de Bach para crear un tratamiento único y personalizado para su cliente. En el mercado existen preparados de flores de Bach para tratar diferentes problemas emocionales previamente mezclados, pero no son recomendables porque no se adaptan a la persona en sí.
En un remedio preparado por un terapeuta vamos a encontrar las dosis justas que la persona necesita según los test y análisis de personalidad que se le han realizado previamente. Así, se trata de un producto totalmente personalizado y que ayudará a que la persona se equilibre totalmente y no solo parcialmente.
Además, la realización de los test y el trabajo del terapeuta puede sacar a la luz rasgos de la personalidad que el enfermo no identificaba como problemáticos y que, por tanto, no veía la necesidad de cambiar.
El remedio de rescate
El remedio de rescate fue creado por el Dr Bach para ser tomado en situaciones de emergencia. Está compuesto por cinco de sus flores y es absolutamente polivalente. Puede ser consumido por todo el mundo y está especialmente indicado para momentos de crisis emocional como por ejemplo un estado de pánico o de gran nerviosismo.
Esto puede incluir desde la realización de un examen que nos altere hasta una discusión fuerte o estar inmersos en un accidente. Este remedio proporciona a la persona un alivio temporal rápido a su malestar, aunque tendrá que seguir el tratamiento habitual.
Existe un segundo remedio comercializado que sirve para estados temporales de insomnio producidos a causa de una situación especialmente estresante, como por ejemplo un problema en el trabajo, el haber recibido una mala noticia o nervios porque se está esperando una noticia que no acaba de llegar y que nos intranquiliza.
¿Cómo se escoge el tratamiento para cada paciente?
El terapeuta especializado en flores de Bach tiene que ser una persona muy intuitiva y saber escuchar a la persona a la que va a tratar. No solo tiene que escuchar lo que dice, sino muchas veces también deberá de interpretarlo.
Existen unas características que son las que determinan un tipo de Flor de Bach en concreto, pero normalmente las personas tienen rasgos que pueden corresponder a más de un tipo de flor. El terapeuta tendrá que saber realizar su fórmula y ofrecerle al cliente la mezcla exacta que necesita para poder equilibrarse.
En algunas ocasiones, será necesario realizar varias pruebas y ajustar los diferentes remedios hasta conseguir el que encaje perfectamente con una persona determinada. También es importante señalar que los resultados se ven a largo plazo ya que el tratamiento natural con flores de Bach es una carrera de fondo en la que deben de implicarse tanto el terapeuta como el paciente.
La confianza del paciente puede hacer salir cosas nuevas al cabo del tiempo de las que no había hablado al terapeuta en un principio, bien porque no querían tratar el tema bien porque simplemente, non era consciente de ello.
Existen una serie de test que el terapeuta puede hacer al paciente para ayudarle a descubrir algunos aspectos de su personalidad y dónde pueden radicar los problemas que le causan la enfermedad física pero es importante señalar que, aunque el terapeuta deba de ser intuitivo e inspirar la confianza del paciente, no es un psicólogo y su trabajo es totalmente diferente.
Dado que las flores de Bach no son tóxicas ni adictivas, las dosis se pueden aumentar en momentos puntuales de crisis, siempre que sea necesario, sin poner en peligro la salud de las personas que confían en este tipo de terapias.